Si alguien en este país sabe sobre lencería para todas las mujeres esa es Nuria Sardá. La diseñadora, que cumple 10 años en el timón creativo de la marca de que fundó su padre, Andrés Sardá, me contaba en una ocasión que la lencería puede ser un gran aliado para la autoconfianza. “Me gusta la idea de vestirse por dentro para después hacerlo por fuera. La lencería es eso que debería hacernos sentir bien con nosotras mismas, y siempre digo que compensa mucho invertir un poco de tiempo en encontrar la prenda de ropa interior que mejor nos siente. Esa que realce lo mejor de nuestro cuerpo: cada una somos un mundo y hay opciones para todas. Para seducir no hay nada como sentirse cómoda”. Antes de que adoptáramos la palabra empoderar, el concepto ya estaba ahí.
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